Lo que te contaré es una historia que transcurrió en un pueblo de Italia, donde vivió mi bisabuelo.
Doña María, era una pobre anciana que había perdido los ojos en un accidente cuando era joven.
Su aspecto daba miedo a los niños del lugar, que la acusaban de vieja bruja y porque aunque no tenía ojos, podía verlos. Por esa razón, la llamaban “la anciana sin ojos”.
Los niños pasaban sus horas molestando a la anciana. La empujaban y se reían de ella; todo lo que le hacían a la pobre mujer era muy cruel. Pero en el pueblo también había gente que le tenía compasión.
Mi bisabuelo era un niño muy bondadoso y respetuoso con la gente mayor y siempre le golpeaba su puerta a Doña María para dejarle el pan colgado y seguía su camino.
Un día como otros, la anciana se encontraba en su casa cuando golpearon su puerta. Seguramente se trataba de aquel buen chico que siempre le dejaba el pan y convencida, la abrió. Para su sorpresa se trataba de aquellos malvados niños.
Estos empezaron a apedrear a la anciana que rogaba piedad, más no se detuvieron. En su agonía la anciana los maldijo. “Te veo y también me verás”, esas fueron sus últimas palabras. Los chicos solo rieron y escaparon de allí.
A la mañana siguiente, las autoridades la encontraron muerta. Por su avanzada edad, determinaron que la mujer se habría resbalado y golpeado la cabeza, provocándole la muerte. Lo que había pasado aquel día quedó en un profundo misterio.
Los muchachos, que sabían la verdad, guardaron el secreto de lo que habían hecho, prometiendo nunca jamás revelarlo.
Una noche uno de los niños se preparaba para dormir, y al apagar la luz de su cuarto sintió un susurro al oído:
—Te veo y también me verás.
Los gritos de terror despertaron a sus padres, que fueron inmediatamente a ver que le sucedía a su hijo.
Lo que encontraron fue algo terrible. El niño estaba muerto con su boca abierta y los ojos arrancados.
Dicen que la anciana sin ojos, asesinó uno por uno a aquellos muchachos, dejando solo con vida a mi bisabuelo, el niño que cariñosamente le llevaba el pan cada día.
Si te ha gustado, comparte, ¡Nos haría muy felices!
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...